El control de velocidad vial es el uso de soluciones físicas para ralentizar los vehículos y/o reducir el tráfico con el objetivo de hacer que las calles sean más seguras y accesibles para los automovilistas, ciclistas y peatones. En efecto, se ha demostrado que es una forma efectiva de disminuir el exceso de velocidad en las vialidades, prevenir choques y evitar pérdidas humanas.
Los ingenieros de tránsito, los funcionarios de obras públicas y los planificadores urbanos han generado muchas estrategias para controlar la velocidad vial de manera efectiva, como la instalación de mesetas y reductores de velocidad, cojines de desaceleración adecuados para el libre tránsito de los vehículos de emergencias, definición y separación de carriles, rotondas de tráfico y carriles exclusivos para bicicletas. Así que estas soluciones se utilizan para brindar más opciones de seguridad en las calles y proteger a todos los usuarios.
Si bien es cierto que estas soluciones pueden implementarse a nivel de calles locales, barrios o ciudades, el control de la velocidad vial es más efectivo cuando es parte de un programa proactivo para mejorar la seguridad vial y desde un panorama más amplio. Esto a menudo se lleva a cabo, después de un análisis para determinar los puntos de alto riesgo en la vialidad.
Sin duda, implementar medidas físicas para reducir el exceso de velocidad, mejora el comportamiento del automovilista y las condiciones de las vialidades para todos sus usuarios, incluyendo conductores, peatones y ciclistas. Así que nuestras innovadoras soluciones, para reducir la velocidad de los vehículos, previenen accidentes y salvan vidas todos los días.
Sus objetivos son:
¿La desaceleración de los autos, incluso de pocos kilómetros por hora, realmente hace la
diferencia? Por supuesto, la posibilidad de supervivencia (%) de los peatones aumenta cuando un vehículo reduce su velocidad:
Se instalan muy fácilmente, cuentan con dígitos altamente brillantes y visibles y un estrobo que parpadea alertando a los conductores que rebasan el límite de velocidad.
Pero ¿realmente funcionan? La respuesta es: sí. Los radares medidores de velocidad ayudan a reducir la velocidad de los autos de forma efectiva. Y se ha comprobado que los automovilistas que reducen su velocidad y respetan los límites, disminuyen los accidentes y mitigan el impacto cuando estos suceden.
Las ciudades que han instalado radares medidores velocidad verán un descenso en las velocidades vehiculares promedio, un mejor cumplimiento de los límites permitidos e incluso una disminución a largo plazo en el exceso de velocidad de los conductores y dichas velocidades promedio.